05/02/2020. LA VANGUARDIA
En esta ocasión nos encontramos ante una información sobre un accidente acaecido en México, en el que han resultado heridas 84 personas migrantes que se encontraban a bordo del camión, con el resultado de una persona fallecida.
En esta información identificamos diferentes estrategias discursivas generadoras de estereotipos y prejuicios.
Por un lado, la anteposición de la condición de “inmigrante” al de persona. Cuando se redactan informaciones acerca de sucesos migratorios, tenemos que tener en cuenta que estamos hablando de personas, personas que, por un motivo u otro, han decidido emprender un viaje con el objetivo de mejorar sus condiciones de vida. Al anteponer su condición de migrantes a la de persona, estamos, la gran parte de las veces, sin pretenderlo, deshumanizándoles al prestar más atención a la situación administrativa..
Esto, que puede parecer un hecho superfluo, cobra vital importancia si tenemos en cuenta que la sociedad como receptora de la información tiende a empatizar más con las víctimas de un suceso si la información que han recibido menciona personas, antes que números o cualquier otro tipo de sustantivo deshumanizador.
Por otro lado, también se habla de “inmigrantes menores de edad” cuando realmente, esta frase sustantiva debería ser sustituida por un sustantivo como “niños” o “menores”.
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