La Nueva España. 24/05/2023.

 

El pasado 24 de mayo, La Nueva España publicó una información cuyo titular era Los carteles de Vox en el Metro de Madrid contra las ayudas a inmigrantes: «No se puede permitir». Se trata de un texto en el que se hace alusión a mensajes políticos en el contexto de las elecciones municipales.

La información aborda la campaña electoral del partido político Vox, y hace referencia a unos carteles que la formación ha colocado en el metro de Madrid. Cuando la prensa ofrece cobertura de la actualidad política, debe cuidar no convertirse en un mero altavoz de mensajes electorales. Para ello, es recomendable contrastar las afirmaciones que estos lanzan, ofrecer un punto de vista alternativo y ejercer una labor crítica. Sin embargo, esta información solo cuenta con la voz de Vox como fuente informativa.

Esto es más necesario cuando lo que lleva a cabo la formación política es un señalamiento público que puede ser considerado como discriminatorio. En este caso, la publicación contribuye a difundir un mensaje de odio que, a su vez, pretende alarmar a la población. Por este motivo, mucho menos conveniente es incluir este mensaje directamente en el titular, que es la parte más llamativa de una información.

Otro elemento que debe cuidarse es el uso de la imagen. La publicación se ilustra con el propio cartel que ha utilizado la formación política en su campaña, contribuyendo a que ese mismo mensaje se difunda directamente. Lo mismo sucede al insertar una publicación en las redes sociales de este partido en el propio cuerpo de texto.

Por otro lado, es necesario declinar términos como “menor extranjero no acompañado” cuando se hace referencia a la infancia migrante. Son personas que sufren una mayor vulnerabilidad, sumada a los condicionantes de su realidad migratoria. Siguiendo con el lenguaje utilizado, diferenciar entre “inmigrantes” y “madrileños” supone una polarización inexacta y discriminatoria. Más, si cabe, cuando esta distinción se realiza con base al nombre de las personas, que en ningún caso ofrece información sobre su nacionalidad o situación administrativa.

Es necesario cuidar los términos que se utilizan para no perpetuar estereotipos, en un ejercicio ético de periodismo. Hablar de migración es hablar de personas, y no cabe distinción a la hora de respetar los Derechos Humanos, sea cual sea el origen de estas.

 

Enlace a la publicación